21/9/10

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Cultura

Durante la semana trascurrida pudimos observar que la sección  de cultura, por ser la celebración del bicentenario todo va relacionada con la conservación y tradición de nuestra cultura, raíces que por ser parte de esta sociedad nos hace ser netamente anfitriones de este magno evento como se viene manejando. En sí  podemos  decir de manera concreta  tratamos de que trasciendan los sucesos ocurridos en nuestro país,  y de alguna manera sentirnos orgullosos de “ser mexicanos”. Pero yo solo me pregunto y los niños héroes? Creo  a punto de vista no salió alguna nota referente a ellos.
A continuación podremos observar algunas notas breves que fueron publicadas, que como ya lo mencionamos hacen referencia al Bicentenario.

Con la finalidad de llenar lagunas en los discursos históricos y artísticos de estos museos, el Conaculta destinará 100 millones de pesos para obtener alrededor de mil 900 piezas.
Rollins piensa lo mismo: “Mucha gente todavía ve al jazz con desdén, aunque no tanto como antes —escribe en el prólogo citado—. Es extremadamente difícil conseguir más conversos al jazz, pero en cuanto a hacer algo con la condición humana relacionada con el jazz, es una proporción perdedora. Así que debo hacer más. No creo que haya hecho todo lo que puedo”.
En palabras de Aurora Cano, directora artística del Dramafest, “con el pretexto del Bicentenario se abrió la invitación a tres países de habla hispana, pues la visión de la Independencia nos motiva a encontrar afinidades, compartimos muchas cosas entre otras: el idioma”, concluye.
Con la obra Cayendo con Victoriano, se inauguró este ciclo de funciones el pasado viernes, en el Teatro el Granero. Se trata de un montaje dirigido por Ariel Fenace a partir de un texto de Luis Enrique Ortiz Monasterio, en el que de manera mordaz se humaniza a un personaje tan sanguinario, siniestro, impopular e inescrupuloso como lo fue Victoriano Huerta, encarnado de manera magistral por José Carlos Rodríguez


El espectáculo Canto por la concordia, preparado para la noche del Bicentenario de la Independencia de México, contemplará además de una selección de temas de autores nacionales, que se remonta desde finales del siglo XIX, un enlace desde el Zócalo capitalino a la Ceremonia del Grito en Palacio Nacional y, posiblemente, un mensaje del presidente Felipe Calderón.

Considerado como uno de los best sellers de El Colegio de México, Nueva historia mínima de México, publicada por vez primera hace tres décadas, se convierte en un libro ilustrado con la intención de llegar a un mayor número de lectores.
Un nuevo intento por recuperar el mural de David Alfaro Siqueiros, pintado hace más de 70 años en Los Ángeles y cubierto con pintura blanca por manos retrógradas, fue anunciado ayer.
La arquitectura de los últimos cincuenta años ha generado una interdependencia con la fotografía que actualmente se vislumbra como prácticamente indisoluble.
La obra “Las gatitas”, del pintor Raúl Anguiano, forma parte de la muestra Generaciones, que organiza el Museo de Arte de San Diego, California, para celebrar el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución.
La diputada Kenia López Rabadán, presidenta de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, presentó una iniciativa que establece las características para la creación de una Moneda Conmemorativa del vigésimo aniversario de la entrega del Premio Nobel de Literatura a Octavio Paz.
La legisladora federal destacó que en 1990, la Academia Sueca concedió el galardón, por décima ocasión en su historia, a una obra literaria en español que por primera vez le pertenecería a un autor mexicano.

Como parte de las celebraciones por el Centenario de la Independencia, en 1910 se logró dar el carácter nacional a la institución, un hecho que será conmemorado el próximo 22 de septiembre.
Comprometido con el pueblo oaxaqueño, el artista anglosajón afincado en Oaxaca ha creado una bebida excepcional, con la que fomenta la creación artesanal y la cultura del mezcal.
La pasarela estará dividida en dos etapas: diseños generales y específicos. En la primera parte se presentarán 31 modelos hechos con alimentos no perecederos, en la segunda habrá 10 diseños hechos a base de chocolate y vino.
Para realizar los modelos, los participantes utilizaron como base un vestido de tela y sobre éste pegaron o cosieron los alimentos. Una vez terminado el desfile, los diseños podrán ser expuestos, dependiendo del tipo de cada uno: si se emplearon en su confección productos secos, el vestuario durará 24 meses, pero si son perecederos, una semana. “Hace dos años se hizo un ropaje de cuchillos, tenedores y plásticos, pintados con aerosol gris, y hasta ahora sigue vigente”, menciona la responsable del evento.

Al frente de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, Román Revueltas Retes estrenó ayer Laberinto de espejos, obra de Eduardo Angulo que hoy se presentará de nueva cuenta en el Centro Cultural Ollin Yoliztli.